En nuestro país más de tres cuartos de las viviendas tienen persianas. Eso se debe a que tenemos una elevada exposición al sol y también a que en nuestra cultura valoramos mucho la intimidad y huímos de las miradas indiscretas.
Este complemento de la ventana está tan arraigado en España que existe una amplia variedad de oferta y multitud de soluciones para los diferentes casos. Pero he aquí también el principal problema: mucha gente infravalora la importancia de la persiana y creen que cualquiera vale… La consecuencia de esta errónea creencia es nefasta: el escaso ahorro económico que supone comprar una mala persiana, al final se vuelve en nuestra contra y nos sale muy caro. ¿Por qué? Pues porque a través de un cajón de persiana de mala calidad se producen importantes pérdidas energéticas. Más o menos como si tirásemos el dinero a través de él.
Por eso es muy importante acompañar una buena ventana con una persiana que esté a su altura. Los cajones de persiana de calidad no perjudican las prestaciones de la ventana, sino que incluso las pueden mejorar en términos de ahorro energético (aislamiento térmico y aislamiento acústico). Y ya sabes que el ahorro energético siempre va acompañado de ahorro económico.
Los distintos tipos de persianas son:
Las vacaciones son la época en la que hay más robos en los hogares. Aparte de los típicos sistemas de seguridad como rejas o alarmas, otro elemento muy útil para proteger la casa de posibles ladrones es instalar unas buenas persianas de seguridad.
Las persianas autoblocantes son un elemento ideal para proteger la seguridad de nuestra casa cuando no estamos en ella.
La persiana autoblocante es una persiana normalmente de aluminio que se compone de dos tipos de lama (principal e intermedia), las cuales se alternan formando un conjunto compacto. La particularidad de esta tipología de lama es que ella sola se gira y autobloquea cuando alguien intenta forzar la persiana desde el exterior, impidiendo que ésta se pueda subir por mucha fuerza que se empleé. De hecho al intentar elevar la persiana desde el exterior, se produce un efecto acordeón que hace que cada una de las lamas se bloqueen entre sí. Por ello, cuanto más se empuje, más se bloqueará la persiana.
Las persianas de seguridad son buena protección para uno de los puntos más vulnerables de tu casa como son las ventanas y las puertas, ya sea de manera aislada (sustituyendo, por ejemplo a las antiestéticas rejas) o complementando a otro sistema de seguridad para tener una protección aún más integral.
Otro punto importante es que en este caso seguridad y diseño no tienen porqué estar reñidos. Existen marcas que las ofrece, como el sistema de persiana RolaPlus, en una amplia variedad de colores que combinan perfectamente con el cajón y con cualquier estilo decorativo. Éstos van desde el blanco a las tonalidades madera, pasando por una gran variedad de colores lisos y metalizados.
La seguridad de las persianas autoblocantes hace que éstas pesen mucho por lo que deberán ir motorizadas para poder manejarlas mejor. Así, podrás subir y bajar cómodamente pulsando un interruptor, por control remoto o empleando sofisticados sistemas domóticos para decidir el momento del día en el que quieres que suban o bajen. También puedes elegir si quieres que funcionen todas las persianas a la vez o controlarlas de manera individual (dependerá de que el mecanismo de control incluya uno o varios canales). Escoger uno u otro sistema eléctrico ya dependerá de tus propias necesidades, preferencias y presupuesto.
Por todo ello, las persianas autoblocantes motorizadas contribuirán notablemente a mejorar la seguridad de tu casa y eso en época de vacaciones es especialmente importante para poder quedarse tranquilo cuando la vivienda se queda vacía durante varios días.
Beneficios de las persianas motorizadas
Las persianas son un elemento esencial de toda casa. Según la OCU, hacer un buen uso de las persianas y las cortinas pueden ayudarnos a reducir hasta en un 10% el consumo de energía de una vivienda.
Las persianas motorizadas nos dan seguridad, y si no están bien instaladas o no son de calidad, pueden acabar siendo el punto más débil de nuestro hogar. Por un mal cajón de persiana entra aire, ruido y frío, arruinando el aislamiento de cualquier ventana. Según el tipo, las persianas motorizadas van más allá y ofrecen toda clase de ventajas como ahorro, seguridad, protección y eficiencia energética. Además, todas las persianas pueden motorizarse con una instalación fácil y segura.
Cómo funcionan las persianas motorizadas
Gracias a la domótica una gran parte de las persianas motorizadas, o también llamadas inteligentes, incluyen un programador automático mediante el cual podemos decidir en qué horas se abrirán y cerrarán. Es un paso simple que implica alta tecnología y un gran ahorro energético, y que marca el futuro de los cerramientos.
Los distintos motores de persiana son ejes clave para entender qué son y cómo funcionan las motorizadas, pues más allá de las funciones sencillas, (como los accionamientos manuales, a través de cinta y manivela) éstos se accionan por un interruptor, que normalmente es inalámbrico, lo que permite controlar las persianas de toda la vivienda en un solo clic.
Los principales sistemas de las persianas motorizadas, más sofisticados, incluyen el funcionamiento de un motor o varios motores al mismo tiempo, y llevan un soporte que posibilita colgarlo en la pared. Estos sistemas hacen que se programe cada persiana, si se quiere, por separado a través de los denominados canales. Cada uno se adapta al tipo de vivienda que uno tenga, sea más o menos grande, y se van sofisticando a medida que aumenta el tamaño de esta con el objetivo de aportar seguridad y confort a todos los rincones de casa. Es decir, los sistemas con uno o dos canales se recomiendan para pequeñas y medianas viviendas y los de varios canales son específicos para chalets o viviendas con varias plantas, y muchas ventanas y persianas instaladas.
Características de las persianas motorizadas
- Están automatizadas.
- Tienen un motor para realizar movimiento.
- Puede programarse cuando se abren y cierran.
- Pueden incorporar sensores solares con el fin de ahorrar energía.
- Incluyen un mando a distancia.
- Aportan gran comodidad y seguridad.
La diferencia principal entre una persiana buena y una mala suele estar en el cajón donde se oculta la persiana. La mayoría son un auténtico coladero por donde se escapa la temperatura y por donde nos entra todo el calor y el ruido de la calle. A diferencia de éstos, los cajones de calidad llevan incorporada una pieza aislante en su interior que no sólo impide las filtraciones sino que ayuda a que la persiana se convierta en una barrera que refuerza el aislamiento de la propia ventana.
Si estáis pensando en cambiar las persianas, aquí os dejamos algunas claves para saber si lo que os están vendiendo es medianamente presentable:
- Transmitancia térmica: Este valor representa el aislamiento térmico. Cuanto más bajo sea, más aísla la persiana. Lo aconsejable es que se mantenga por debajo de 2.
- Aislamiento acústico: Nos dice su capacidad de reducir el ruido que entra del exterior. Lo ideal es que se encuentre por debajo de 42 dB.
- Permeabilidad al aire: Indica si nos entrara aire a través de ellas. Es recomendable que sean de Clase 4.